Sin embargo, no he dejado de escribir e incluso he ido un poco más allá al exponer mis vergüenzas por aquí, donde de uvas a peras algún ser se pasa y compartimos un rato.
Pero, ahora estoy pensando que....mmmmm (tiempo de que las neuronas trabajen)........ en términos de comunicación, son las palabras las que no terminan de gustarme, las que se me quedan cortas. Me resultan mucho más elocuentes una mirada, aunque sea de reojo; un ligero roce en la mano; una despedida corta; un abrazo; un beso; una caricia...........; un........; una patada por debajo de la mesa y dejemos de pensar ya, jeje.
En definitiva, tocarse. Es curioso lo poco que nos tocamos unos a otros con lo agradable que es. Supongo que hay que saber tocar, hacerlo despacito y suave para que el de enfrente no dé un respingo, y un poquito antes mirarle, mirarle pensando bajito "no te asustes, tocaré tu brazo despacio, dejaré mi mano allí un momento para que puedas sentir su calor, ves? a mí el corazón también me late".
2 comentarios:
y ahora el corazón, a mí también me late... un poco mejor
Y yo que me alegro, querido Anónimo, jeje.
Publicar un comentario